La concejala hace una descripción de los problemas actuales que padece el Sistema Integrado de transporte, siendo uno de los principales medios de transporte de la ciudadanía, pero que lamentablemente no cuenta con las medidas requeridas de un transporte principal en la ciudad.
Estos son algunos de los muchos problemas de Transmilenio:
1. Transmilenio tiene como primer problema la barrera del acceso por la incapacidad de unificar tarjeta de pago. Como se sabe una de color verde sirve para la troncal de la avenida 26, otra azul, sirve para la avenida caracas, la avenida 30, suba y calle 80, y finalmente la roja que solo se recarga en estaciones sirve para todo el sistema. El costo de esta deficiencia es que el usuario debe comprar las tarjetas con un costo de 3 mil pesos, recargarla y usar varias para poder acceder al sistema. La unificación de este medio de pago está pendiente desde hace varios años y la administración no fue capaz de llevar a los contratistas hacia un acuerdo de unificación.
2. Se creó una tarifa diferencial para la tercera edad. Y a pesar de que el 20% de los ciudadanos bogotanos hace parte de esta franja de población la difusión de la medida que significa menor costo no se ha ejecutado en el canal capital. Entonces hace falta información a los ciudadanos.
3. Los usuarios de TransMilenio perdieron la escasa cultura ciudadana formada con mucho esfuerzo cuando inició su operación; hoy no ceden las sillas a las personas que merecen trato preferencial como mujeres en gestación, personas de la tercera edad y personas con discapacidad; aunque no se crea este aspecto contribuye a mejorar la seguridad en los buses, claro, si quien dirige la seguridad en la ciudad tiene un enfoque integral y no policivo de la seguridad que en el caso de las grandes ciudades debe ser fundada en la convivencia y el respeto, para lo cual hay expertos en cómo crear este comportamiento.
4. El Transmilenio tiene deficiencias en señalización. Desde la administración anterior no se instalan nuevas señales para identificar rutas, horarios, ni mapas. Peor aún, el personal contratado como guía no está en las troncales de las fases 1 y 2, mientras en la 3 el personal excede la necesidad y no está capacitado. Hay que instalar señalización en la troncal de la caracas, para informar las rutas nuevas y asignarle más guías de los que contrata el IDIPRON con los 100 mil millones que le asignó este consejo en el presupuesto 2015.
5. Las rutas están saturadas permanentemente, y otras no están en los sistemas para que el usuario sepa cómo desplazarse, esta dificultad aumenta la congestión de las rutas y deja a otras sin pasajeros.
6. Los conductores de buses articulados han provocado en los últimos años accidentes con muertos y heridos, situación que demuestra que no tienen la capacitación adecuada. Hay prácticas de los conductores que obedecen a patrones del viejo modelo de transporte público que se deben modificar con nuevo personal.
7. El Hurto, abusos sexuales, riñas y atracos colectivos que son el tema fuerte de inseguridad. Si bien, no se puede ubicar un policía por cada bus, el sistema NO tiene un plan permanente de cultura ciudadana en el transporte masivo, como si lo tienen todos los sistemas de transporte organizado en otras ciudades. Como Medellín, incluso Bucaramanga y Barranquilla, dan orientaciones sobre cómo salir y entrar al bus, como desplazarse dentro del mismo, y cómo crear una cultura de respeto, control a la seguridad y denuncia de hechos ilícitos.
8. El aseo de los buses está fallando, en general las sillas requieren ser lavadas, así como las barras al interior y el piso, porque la percepción de limpieza también incide en el comportamiento.
9. El Gerente de TransMilenio prometió la instalación de cámaras para contribuir a judicializar hechos delictivos en los buses. El Fondo de Vigilancia y Seguridad de Bogotá suscribió un convenio con TransMilenio para instalar 1.700 cámaras de seguridad en portales, estaciones y articulados de todo el sistema. Según los medios de comunicación, la estrategia tuvo un costo de 7.400 millones de pesos, de lo cual no se ha ejecutado ni el 1%. Este anuncio se hizo el 9 de diciembre de 2014.
Son temas de movilidad que afectan a todos los bogotanos, desde el concejo se ha venido solicitando la Construcción de la troncal de la Avenida Boyacá ya que es una necesidad de la ciudad, no puede ser un capricho del Alcalde de turno. De acuerdo con la respuesta entregada por la Secretaria de Movilidad sobre la proposición de la Troncal de la Boyacá, la Secretaria envío un cronograma en donde fijo que para Agosto de 2014, ya se tendría la adquisición Predial en un 80% y para Septiembre del mismo año estaría en etapa precontractual y de construcción, para lo que le concejal hace un llamado de atención a la secretaría de movilidad del ¿porque no se ha ejecutado el Proyecto tal cual se planteó el cronograma entregado?
Así mismo, se hace referencia al SITP que también ha venido presentado hechos lamentables, y que a la fecha no se han detectado planes de mejora para el mismo. Esto con base en lo siguiente:
1. Las dos fechas de día sin carro han demostrado que el transporte público produce el 70% de las emisiones de CO2 en la ciudad. Debe haber un día sin vehículos de servicio público para medir el impacto en emisiones de CO2, aun cuando los estudios ya han confirmado que es el servicio público el que más emisiones produce. La sustitución de la flota de buses y busetas ha buses eléctricos ha funcionado en Bucaramanga.
2. El llamado SITP, tomó los buses y busetas viejos y les cambió el color para mantenerlos circulando por la ciudad con igual nivel de emisiones y comportamientos al conducir, más la avería permanente de los buses y busetas. El proceso de chatarrizacion quedó estancado y se esperaba que para el 1 de junio se acabara la guerra del centavo, pero ayer se informó que esto no será así, por nueva modificación al cronograma de sustitución.
3. Es imposible saber qué ruta es la adecuada entre varias que tienen el mismo nombre y diferente número pero igual recorrido., es imposible abordarlos. Se ha venido solicitando que se debe orientar el usuario para fomentar el uso del sistema.
4. El comportamiento a la hora de conducir no es el adecuado manejo a alta velocidad, irrespeto a las señales de tránsito, malas prácticas al conducir, maniobras peligrosas.
5. Hay paraderos del SITP sin terminar en toda la ciudad, solo en la avenida las Américas entre la carrera 68 la carrera 30 las paradas no tienen espacio para que el usuario pueda esperar la ruta con tranquilidad.
6. Los hechos delictivos como atracos, abusos sexuales se presentan por las misma razones que en el TrasnMilenio; en hora pico hay demanda excesiva del servicio ante la ausencia de medios alternativos de transporte.
7. En este medio tampoco hay cultura ciudadana para acceder y usar el servicio, además de que fue el servicio que inició con la venta de tarjetas y la obligación de comprarlas y portarlas. Esa obligación que solo se produce con el SITP y la troncal de la calle 26, es funcional para los buses y busetas pero no para el TransMilenio.
Esto no es más que un resumen de uno de los muchos problemas de la ciudad en el tema del Sistema de transporte, y es una responsabilidad que se viene para la próxima administración, por eso la concejal solicita a los candidatos tener en cuenta los puntos mencionados y buscar planes de mejora para el próximo gobierno, que permita una movilización segura para los bogotanos.