Bogotá noviembre 28 de 2013. En el marco del debate del proyecto de publicidad exterior debatido este jueves en el Concejo de Bogotá, se logró evitar que tres de los “micos” denunciados por la concejal Angélica Lozano, quedaran en el articulado.
El primero de ellos es el que permitía en Bogotá los carros valla, motos valla, carros tarima y en general cualquier vehículo que tenga como actividad exclusiva la publicidad, lo que contribuía a una mayor congestión vial y contaminación en la ciudad.
“Afortunadamente se logró atajar uno de los micos que encontré de autoría del concejal Fernando Cepeda y Javier Palacio, el cual autorizaba vehículos con actividad publicitaria exclusiva en carros valla, motos valla y otros, bajo el disfráz de vehículos de tecnología limpia,”, dijo la concejal Angélica Lozano.
El segundo mico permitía la prórroga ilimitada de los permisos para cualquier elemento de publicidad. Finalmente, se determinó un período fijo con la posibilidad de prórroga por una sola vez Por ejemplo, en el caso de las vallas el tiempo máximo es seis años, al cabo de los cuales se deberá tramitar un nuevo permiso.
El último mico permitía un traslado de sitio para los elementos, lo que evitaba el trámite de un nuevo permiso. Lo cual fue finalmente eliminado.
Lozano lamentó que no se haya permitido establecer tasas de compensación para aumentar la irrisoria suma, ya que hoy por cada valla pagan a la ciudad sólo 6 salarios mínimos, suma que debería ser mucho más alta.
Finalmente la cabildante insistió que en Bogotá la publicidad se debe “regular y no regalar”.
