Con 29 votos a favor y 0 en contra fue aprobado en Sesión Plenaria el Proyecto de Acuerdo No.038 de 2021 “POR EL CUAL SE ADOPTAN MEDIDAS DE PROTECCIÓN DE NIÑOS, NIÑAS, ADOLESCENTES, ADULTOS MAYORES Y POBLACIÓN NO FUMADORA A TRAVÉS DE LA PREVENCIÓN DEL CONSUMO DE CIGARRILLO, PRODUCTOS DE TABACO, DERIVADOS, SUCEDÁNEOS O IMITADORES COMO SISTEMAS ELECTRÓNICOS DE ADMINISTRACIÓN DE NICOTINA - SEAN, SISTEMAS SIMILARES SIN NICOTINA- SSSN Y PRODUCTOS DE TABACO CALENTADO - PTC Y LA EXPOSICIÓN AL HUMO DE TABACO Y VAPOR EN EL DISTRITO CAPITAL".
El Proyecto de Acuerdo que pasará a sanción de la Alcaldesa de Bogotá, Claudia López, adquiere relevancia frente a las cifras que deja la epidemia del tabaquismo en la medida que:
1. Contribuye a garantizar el derecho fundamental a la salud y el derecho a gozar un ambiente sano a niños, niñas, adolescentes y adultos mayores, quienes son los principales beneficiarios de los parques del Distrito.
2. La prevención del consumo de tabaco y de la exposición del humo de tabaco en los parques del Distrito amplía los entornos libres de humo en nuestra ciudad.
3. Este Acuerdo contempla la inclusión del cigarrillo electrónico dentro de las medidas de prevención, puesto que los niños y adolescentes que utilizan cigarrillos electrónicos tienen al menos el doble de probabilidades de fumar cigarrillos e incluso de otras sustancias psicoactivas más tarde en su vida. Para los expertos en salud pública estos podrían renormalizar el hábito de fumar, retrasar o impedir los intentos de cesación, promover el consumo en la juventud y volver a captar a los ex fumadores en la adicción a la nicotina.
4. A partir de esta iniciativa la Secretaría de Educación realizará campañas pedagógicas para la comunidad educativa con el fin de promover modos, hábitos y estilos de vida saludables que fomenten la trasformación de entornos y la relación del ser humano con la naturaleza.
5. Este Acuerdo promueve la aplicación de las medidas MPOWER de la OMS para reducir el consumo de tabaco y su carga de morbilidad y mortalidad en la capital.
“” señaló el Cabildante.
El Acuerdo nace del llamado de la OMS, donde insiste que hacer retroceder la epidemia del tabaquismo debe ser hoy una prioridad máxima para la salud pública y los dirigentes políticos, puesto que cada año 8 millones de personas fallecen a causa del consumo de tabaco, más de 7 millones se deben al consumo directo, alrededor de 1,2 millones como consecuencia de la exposición al tabaco y unos 700 millones de niños, casi la mitad de los niños del mundo, respiran aire contaminado por humo de tabaco.
El consumo de tabaco es un factor de riesgo de seis de las ocho causas principales de mortalidad en el mundo, el consumo de tabaco constituye la principal causa mundial de defunción prevenible y el costo económico mundial del hábito de fumar es de 1,4 billones al año, 400 mil millones de dólares en costos de atención médica y 1 billón en costos indirectos por la pérdida de productividad como consecuencia de las muertes prematuras y la exposición al humo.
A su vez, es importante mencionar que un grupo de expertos de la OMS establecieron que los fumadores tienen más probabilidades de desarrollar síntomas graves en comparación con los no fumadores y de fallecer a causa de la COVID-19, y por esta razón, la OMS de cara al día mundial sin tabaco 2021 ha puesto en marcha la campaña “comprométete a dejarlo durante la COVID-19”, pues la pandemia constituye un incentivo para la cesación del consumo de tabaco y el fomento de hábitos y estilos de vida saludables.
En el caso de Colombia, de acuerdo con un estudio del 2019 de la Organización Panamericana de la Salud en el año 2017 tres millones de colombianos consumieron algún tipo de tabaco causando la muerte de 34.800 personas, el 44% de manera prematura, es decir, ocurrió antes de los 70 años y la exposición al humo de tabaco provocó 6 mil muertes de las cuales 154 fueron en niños y adolescentes. La epidemia del tabaquismo le costó a la economía del país 17 billones de pesos.
Por otra parte, el estudio encuentra que la ampliación de medidas de control de tabaco en el país permitiría salvar aproximadamente 10.300 vidas cada año y reducir la incidencia de enfermedades atribuibles al consumo de tabaco.