Lo preocupante de estas nuevas dimensiones que contempla el POT es que solo 13 metros, de las vías de 90 metros, serán destinados para los vehículos particulares (carriles mixtos), lo que representará más trancones y caos para la movilidad en Bogotá. 23 metros serán para paisajismo y otros 13 metros para la circulación peatonal.
En las vías de la malla vial intermedia de menos de 27 metros, se podrán usar 6 metros para el tránsito de los vehículos y en las vías inferiores a 10 metros de ancho no podrían circular los vehículos particulares.
Para cumplir con este propósito, el POT crea el programa “calles completas” con el que se intervendrán 362 Kilómetros de malla vial urbana, distribuidos en 91 proyectos de malla vial arterial y 26 proyectos de malla vial intermedia.
El POT ordena que cuando se adelanten proyectos en los que el perfil vial no cumpla con el ancho suficiente para garantizar los mínimos de cada franja, se deber priorizar la implementación de la infraestructura para peatones, ciclistas y transporte público.
“Con el POT vigente, solo el 30% de la malla vial arterial se encuentra construida en su perfil vial propuesto por lo que es importante revisar el espacio asignado a paisajismo y determinar cuál sería el costo de intervenir integralmente todos estos proyectos y cómo será su esquema de financiación en estos 12 años” concluyó el cabildante González.