“Es absurdo que se reduzca el presupuesto de una institución que atraviesa por una profunda crisis financiera y que este año tuvo un déficit de $25.000 millones“, aseguró el cabildante.
Santos y Peñalosa insisten en una política calculada para desfinanciar la educación pública, que consiste en aumentar la cobertura reduciendo los recursos de la Instituciones de Educación Superior. La Universidad Distrital tiene 26.401 estudiantes, pero de acuerdo con cifras oficiales, con su presupuesto solo debería tener 18.066, su infraestructura tiene capacidad apenas para 11.656 estudiantes y, con el número actual de profesores de planta, solo se podrían atender 16.925 alumnos. Lo peor, señaló Sarmiento, es que el Rector presenta como algo positivo que la Universidad pueda “hacer más, con menos”, ocultando que esta política deteriora la calidad de la educación y es la causa del grave hacinamiento que sufren estudiantes, profesores y trabajadores.
El concejal del Polo Democrático Alternativo rechazó el recorte presupuestal y señaló que en Colombia la mala educación se ha impuesto como una política de Estado, tal y como lo ha explicado el senador Robledo en reiteradas ocasiones (Ver debate), e invitó a la comunidad universitaria a elevar la movilización democrática en defensa de la Universidad Distrital.