El concejal por el Movimiento progresistas, Hollman Morris, aseguró que el metro elevado no cumple los requisitos para solicitar ante el concejo de Bogotá las vigencias futuras excepcionales, pues no cuenta con estudio de ingeniería de detalle. La ley 1483 de 2011 de vigencias futuras excepcionales, norma orgánica en materia de presupuesto, responsabilidad y transparencia fiscal para las entidades territoriales, reglamentada por el decreto 2767 de 2012 establece “Sin perjuicio de los estudios técnicos que deben tener todos los proyectos, los proyectos de infraestructura, energía y comunicaciones el estudio técnico deben incluir la definición de obras prioritarias e ingeniería de detalle…”.
En consecuencia, si la administración de Enrique Peñalosa quiere solicitar la aprobación de vigencias futuras excepcionales, con el rigor de la ley, deberá presentar estudio de ingeniería de detalle, con el que no cuenta el proyecto metro elevado.
Según Andrés Escobar, gerente de la empresa metro, no solo el proyecto metro elevado no cuenta con este nivel de estudios pues está en etapa de factibilidad, sino que se proyecta que sea contratado sin estudio de ingeniería de detalle para que el estudio sea realizado por el contratista.
El concejal Hollman Morris aseguró que esta es la modalidad que fue utilizada en el metro de Medellín, conocida como llave en mano en la que se contratan el estudio de ingeniería de detalle y la construcción en una misma licitación, al mismo contratista, y que fue cuestionada por los retrasos y sobrecostos.
Además, el concejal llamó la atención sobre la importancia de que se adelante previamente el estudio de ingeniería de detalle pues solo es este estudio el que determina el costo exacto del proyecto; al día de hoy el valor de 12.9 billones de pesos es un costo estimado basado en el estudio de factibilidad que no determina con exactitud el costo final del proyecto metro elevado. ¿Van a solicitar vigencias futuras excepcionales sobre un valor estimado?
El concejal progresista pidió que este proyecto de gran importancia para el país sea estudiado rigurosamente por el concejo de Bogotá pues “Una obra de infraestructura de esta magnitud sin ingeniería de detalle, sin validación académica de la etapa de factibilidad, no es una obra seria, ni rigurosa y está en riesgo de caer en corrupción.”