El día 20 de marzo de 2024 la bancada del Polo Democrático Alternativo realizó el debate sobre las Actuaciones Estratégicas (AE) en el Ordenamiento Territorial de Bogotá. Se enfocó en la premisa: Ninguna decisión sobre la gente, debe ser tomada sin la gente, que implica interpelar el modelo de ciudad y preguntarse para quién, y sobre qué intereses se toman las decisiones del Ordenamiento Territorial en Bogotá y el papel que juegan las actuaciones estratégicas como intervenciones urbanas integrales, para concretar el modelo de ocupación territorial.
Bogotá se encuentra en un momento en el que dará inicio a la implementación del Plan de Ordenamiento Territorial como instrumento para el desarrollo planeado de la ciudad y, hay un Plan de Desarrollo que se está formulando y puede dotar al POT de mecanismos que permitan potenciar una visión compartida de ciudad, pero termina decantando el proceso de reglamentación de las figuras que propone.
También pone sobre la mesa preguntas y cuestionamientos que permitan ubicar lo central en la configuración de la ciudad y saber cómo disminuimos los niveles de segregación, la desigualdad, la pobreza y los desequilibrios que están degradando los ecosistémicos hasta llegar a un punto de no retorno.
La concejala Donka abordó tres tensiones, inicialmente, que permiten analizar el actual enfoque de las actuaciones estratégicas en el marco del POT
- Expansión VS renovación, como parte de las concepciones para desarrollar la ciudad.
- Ciudad Región: Conurbación vs Desconcentración como parte de las concepciones para desarrollar la ciudad.
- Ruralidad y modelo de producción campesina para la soberanía agroalimentaria VS predios de engorde para la especulación inmobiliaria y el “volteo de tierras” para la expansión descontrolada.
La formulación y la reglamentación de las AE se presentan como una oportunidad para combatir la desigualdad y la segregación o pueden ayudar a profundizarlos de manera alarmante. Esto se logra mediante el asentamiento de criterios de sostenibilidad ambiental y mejoramiento del paisaje urbano y de la seguridad ciudadana promoviendo la mezcla de usos y grupos sociales.
La ciudad debe pensarse de manera articulada, las AE se están percibiendo como piezas sueltas, y no se puede olvidar que hay otra ciudad en medio. La pregunta es ¿los proyectos integradores son insuficientes? Dado que el POT contempla una serie de mecanismos e instrumentos para articular las figuras de Ordenamiento Territorial, es clave que eso ocurra a través de la planificación participativa y se integren con lo que va a ocurrir en las actuaciones estratégicas para la Ciudad.
La concejala quiere poner en la lupa de la ciudad cinco elementos clave que permitirán realizar propuestas para mejorar la visión actual:
1. Respecto al tejido económico y productivo, es de considerar que en el marco de las condiciones socioeconómicas con las que en teoría deberían cumplir quienes formulen una AE, se deben tener en cuenta actores como el comercio informal, la venta ambulante, y las economías populares, lo que necesariamente debe hacer parte como propuesta de las articulaciones que generen en la formulación de las AE.
2. Sobre el componente de vivienda social, la reglamentación de los porcentajes obligatorios de VIS y VIP es señal de una política segregadora y excluyente. Es un reto para el POT definir mejores condiciones de inclusión y mezcla social, por lo tanto, es pertinente diferenciar en el marco de las AE las políticas de vivienda para atender el crecimiento vegetativo esperado y evitar seguir expulsando población de bajos recursos a ciudades dormitorio.
Un 33% de las necesidades de vivienda corresponden a hogares con ingresos menores a 2 salarios mínimos, un buen porcentaje con informalidad en el trabajo, es decir, la vivienda formal se construye mayoritariamente para los precios más altos, para los hogares de mayores ingresos, mientras la composición socioeconómica de la población es la inversa. Lo que quiere decir también, que es una imposición del mercado. En este sentido, deben responder las AE permitiendo proyectos integrales que ofrezcan a varios segmentos oportunidades claras.
Un porcentaje importante de las necesidades de vivienda en el periodo del POT será resuelto, con intervención estatal o no, en alquiler en zonas populares, por tanto, es conveniente definir en el POT programas de mejoramiento con oferta de vivienda nueva, en subdivisiones de vivienda y similares. Las AE son una figura clave para articular acciones complementarias para dar respuesta a las necesidades contextuales de las personas con ingresos bajos.
3. En cuanto a la Integración de figuras de ciudad y los esquemas de gobierno, nos cuestionamos sobre cómo los proyectos integradores de las UPL como los modelos de gobernanza y los proyectos de renovación urbana para la movilidad sostenible (Prums). Responden a la pregunta ¿Cómo se integran las Actuaciones Estratégicas al restante 84% de la ciudad?
4. Respecto a la Participación ciudadana y el modelo de toma de decisiones, se cuestiona el funcionamiento de la figura de gerencia pública o mixta, esta expone las actuaciones a una posible lógica de privatización al ser demasiado abierto, por lo que surge la necesidad de acotar la figura en el marco de su formulación para generar equidad en la toma de decisiones.
5. En términos del enfoque de revitalización, las AE necesitan articular vivienda de reúso y recuperación de vivienda pública en arriendo. Por esto, la pregunta es ¿Dónde están los proyectos para mejorar la ciudad que por años se ha venido construyendo? Es necesario articular la estrategia de densificación acotada y programas de mejora y revitalización por medio de créditos que permitan, entre otras operaciones, dividir casas y apartamentos de grandes áreas en 2 o más unidades, lo que generaría renta y nuevas unidades habitacionales, y la “Oferta de vivienda en alquiler a través de alianzas público-privadas”.
Es importante recuperar lo enunciado por el PDD de la Bogotá Humana en el que se plantea: “Recuperar la vitalidad y el significado cultural de la ciudad construida por generaciones. La revitalización de la ciudad consiste en intervenir zonas deterioradas o con precarias condiciones urbanísticas y ambientales, con el propósito de actualizar las infraestructuras de servicios públicos, aprovechar la oferta de transporte público, aumentar la oferta de espacio público y equipamientos, recuperar su significado como bien colectivo y patrimonial, potenciar su dinámica socioeconómica, aumentar el verde urbano y mejorar las oportunidades de la ciudadanía en el acceso a un hábitat humano”. (Articula 22, PDD, Petro).
Este es un tema que insta a trabajar juntos y juntas, es un tema de ciudad que requiere la colaboración de todos y todas. Hay mecanismos orientados por el diálogo, donde debemos incluir a los distintos actores estratégicos, tanto públicos, comunitarios y privados.
Es fundamental que el agua sea considerada un hecho metropolitano para la región, ya se incluyó la perspectiva del agua como parte de los servicios públicos, pero el hecho regional del agua permite el análisis de los ecosistemas vitales más allá del manejo hidráulico del río Bogotá y el sistema de abastecimiento hídrico.
Se espera que en esta nueva versión haya una comprensión integral de la vida campesina en Bogotá, deben construirse principios donde la expansión no debe pasar, pues son claves las formas de vida que ocupan histórica y diversamente el territorio. Es importante que se incluyan dentro de los objetivos la potenciación económica, no se puede solamente pensar en economías de la mayor escala, incluir las economías populares en las AE, es fundamental.