¿En qué temas debemos concentrarnos en el cabildo distrital para lo que resta del año? Adicional a la discusión de fondo sobre lo que debe ser la institucionalidad entre la Ciudad y el departamento, que empieza por analizar cómo debe ser el acceso de Bogotá a la región metropolitana, hay otras dos urgencias: la educación y el trabajo.
Sobre esos temas, la encuesta empieza por revelar lo que constituye un reto enorme: jóvenes de 15 años de edad, que representan el 52% del total, de personas en edad de estudiar, coincide en que la educación empeoró después de la pandemia. Las diferencias locales aquí son críticas, pues mientras en localidades como: Usaquén, Suba y Chapinero la insatisfacción se acerca al 40% de los encuestados; en Antonio Nariño, Tunjuelito, San Cristóbal y Rafael Uribe Uribe, esta proporción se acerca al 60%. Hay además UPZ en una situación alarmante como San Blas, Fontibón San Pablo y Tintal Sur, en las que apenas 3 de cada 10 estudiantes piensan que la educación se mantuvo igual o mejoró. Los 7 restantes opinan que empeoró.
No se puede aceptar este retroceso en una ciudad que debe crecer en capital humano si quiere resolver sus problemas de pobreza, falta de movilidad social y desigualdad. Hay que terminar la construcción de nuevas sedes educativas, meta que según Segplán[1] va en un 31,4 por ciento cuando el tiempo para la ejecución de las obras ya ronda el 65 por ciento. Hay que terminar las intervenciones a las 730 sedes educativas actuales con obras de mejoramiento. Allí el retraso es similar, pues al primer trimestre de este año, solo se había intervenido 289. Finalmente, hay que continuar con los esfuerzos que se han hecho en cuanto a becas, capacitación docente y educación posmedia[2], tema en el que, según el sistema de seguimiento al Plan de Desarrollo, aún no ha habido ningún avance.
Todo esto debe además hacerse leyendo las necesidades e intereses de los jóvenes, escuchándolos y haciéndolos partícipes, para que no sientan, como ellos lo indican en la encuesta, que la educación se deteriora. Pero así mismo hay que recordar que la educación es fundamental para fortalecer el capital humano, con el que se mueven las empresas y nuestra economía. Una agenda normativa que impulse la formación para el trabajo es muy necesaria. Hoy menos de 15% de personas de más de 15 años tienen formación técnica o tecnológica en la ciudad, frente a 24% de formación universitaria. La mayoría de ellos vive además lejos de los centros de trabajo. Ambos temas, educación y empleo, deben ir hoy de la mano, y la agenda del Concejo en este sentido será clave si queremos lograr una ciudad educada y competitiva.
Concejal de Bogotá
[1] Herramienta de la Secretaria de Planeación para el seguimiento de su Plan de Gobierno.
[2]La formación posmedia se define como el tipo de formación que las personas encuentran al culminar la educación básica y media y puede resumirse en cuatro grandes rutas: la educación formal superior, la educación para el trabajo y desarrollo humano (ETDH), la formación para el trabajo (FPT) y el Reconocimiento de Aprendizajes Previos (RAP). https://www.obsgestioneducativa.com/wp-content/uploads/2022/02/Caracterizacion-de-la-formacion-posmedia-en-Colombia.pdf