En este momento el ESMAD interviene en el Humedal Tibabuyes el campamento de defensores y activistas ambientales, que instaló la comunidad para frenar las obras de endurecimiento que se venían adelantando en el ecosistema. Es importante mencionar que hubo una querella por parte del Acueducto y la audiencia que se había venido aplazando en reiteradas ocasiones hoy se realizó sin los querellantes y la orden de la inspectora de la Policía fue retirar el campamento.
Estamos muy preocupados por la seguridad de los activistas y por la escalada que esta tomando esta intervención con la presencia del ESMAD. Es necesario que la alcaldía escuche a la gente, la vía debe ser el diálogo no la violencia. Estas obras que dejó Peñalosa son ilegitimas y afectan gravemente el ecosistema, además, también sabemos que se está planeando en el POT que por este mismo espacio se construya la segunda línea del metro. Todos los días vemos como la Crisis climática se manifiesta en catástrofes ambientales y aún así en Bogotá seguimos privilegiando el cemento.
Nosotros hemos puesto una acción de cumplimiento acompañando a las comunidades defensoras y esperamos que el juez la asuma, en el debate de Humedales en el Concejo de Bogotá demostramos que esta obra incumple con el plan de manejo ambiental, por lo tanto es ilegitima.
Desde este espacio le hacemos un llamado a la alcaldesa, Claudia López, para que busque con diálogo social y con derechos humanos salidas y evite una tragedia en donde se vea envuelta la juventud que hoy está defendiendo lo público.