“Ni los más acérrimos opositores de la alcaldesa Claudia López y del proyecto llamado Corredor Verde de la Séptima pueden decir que lo que se tiene hoy es ideal con esa emblemática vía, ni en términos de movilidad ni de urbanismo. Por eso, yo sí creo que hay que hacer algo con la Séptima. ¿Tal cual como lo plantea la Alcaldía de Claudia López? Eso depende de las respuestas que dé la Alcaldía a las inquietudes ciudadanas y a preguntas, por ejemplo, sobre las dos vías que recibirán el tráfico que pretende desviarse de la séptima, la Carrera 11 y la Avenida Circunvalar, y sobre la capacidad de la Séptima para albergar todo lo que propone el proyecto de la Alcaldía que está a punto de salir a licitación”, sostuvo la concejala del Nuevo Liberalismo.
Durante el foro que se realiza en el Concejo de Bogotá sobre la megaobra, Gómez informó que tanto el IDU como la Secretaría Distrital de Movilidad dieron respuestas vagas sobre las obras previstas para soportar el desvío del tráfico de la Carrera Séptima tanto en la Circunvalar como la Carrera 11. “El corazón de la polémica ha girado en torno al cambio que propone la Alcaldía en el sentido norte-sur desde la calle 92: Por el desvío de los carros particulares en ese punto hacia la Carrera 11 y hacia la Avenida Circunvalar”, advirtió Gómez. “Hago un llamado de atención. No hay estudios sobre el impacto en la movilidad de la Carrera 11 y de la Circunvalar como consecuencia de la restricción del tráfico de vehículos por la séptima de la calle 92 hacía el sur”.
Para la concejala, también hace falta que el IDU y la Secretaría de Movilidad expliquen a qué pasará en la carrera 11 desde la calle 82 hacia el sur.
El director del IDU, Diego Sánchez, reveló que en las obras de la Carrera 11 se afectaría el 20% de los 439 árboles que existen actualmente en ese corredor, es decir, cerca de 90 árboles, principalmente del costado occidental.
Adicionalmente, Gómez recordó que la alcaldesa López siempre habla de la ampliación de la Séptima hasta la calle 200, pero no sobre “qué va a pasar después de la calle 200 ¿Hay planes con el municipio de Chía para este corredor vial? Porque después de la 200 la avenida se convertiría en un embudo”, advirtió la concejala.
A la concejala le preocupa, adicionalmente, que el proyecto incluye todos los modos de transporte en una vía que es angosta. “Si bien hay predios comprados que servirán para hacer plazoletas, la inquietud es si el espacio que soportará el tráfico de vehículos es similar al que tenemos hoy. Cuando uno va a comprar una casa y le dicen que tiene tres habitaciones, tres baños, sala, comedor, cocina y balcón, uno se ilusiona. Pero la desilusión es grande cuándo uno pregunta cuántos metros cuadrados tiene esa casa y le dicen que 50”, finalizó la concejala.
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