En la Comisión Legal para la Equidad de la Mujer del Concejo de Bogotá se adelantó debate de control político respecto a la violencia contra las mujeres y feminicidios en la ciudad, en aras de hacer seguimiento a la atención que brindan las entidades del Distrito. En ese sentido, son preocupantes las cifras presentadas por la Secretaría de Integración Social sobre las denuncias que reciben las Comisarías de Familia, pues se señala que las violencias psicológica, física y económica son las que más se presentan y se infringen por parte de las exparejas (39%), los hijos (22%) y las parejas (19%). Esto, manifestado en que para 2023 hubo 1.473 mujeres víctimas de VBG y que en menos de 6 meses de 2024 ya se reportan 735 víctimas; sin cumplir la mitad de 2024 va el 50% de lo reportado el año anterior, lo cual debe prender las alertas institucionales.
A su vez, la Secretaría de la Mujer indica que entre 2020 y 2023 hubo 5.841 mujeres en riesgo de feminicidio en Bogotá, siendo Bosa, Ciudad Bolívar y Kennedy las localidades con más casos y para 2024 ya se registran 655 casos. Según la Fiscalía General de la Nación, entre 2020 y octubre de 2023 se registraron 60 casos de feminicidio en Bogotá, siendo el 2023 el año más violento con 21 casos. Sumado, vemos con preocupación que en el primer semestre de 2024 ya se han registrado 27 feminicidios en la ciudad (Observatorio Feminicidios Colombia), incrementando la inseguridad para las mujeres, incluso para aquellas que han acudido a las entidades a denunciar y recibir protección. Frente a esta realidad, es menester resaltar que una de las principales falencias institucionales gira en torno a la prevención, pues las medidas que se toman son reactivas, por lo que es fundamental que se refuercen las campañas en ese sentido, haciendo énfasis en la necesidad de un cambio de la cultura machista y brindando herramientas suficientes a las mujeres para identificar y buscar ayuda pronta y eficiente ante una VBG.
De igual forma, en el proceso de atención a las VBG existen barreras tales como: suministro de información incompleta por parte de quienes brindan la atención; falta de formación de servidores en enfoque de género para la atención de violencias; errores en la emisión o implementación de las medidas de protección; incumplimiento del principio de no confrontación con el agresor; la no recepción de denuncias por supuesto “destiempo”, falta de competencia o incluso el señalamiento que los hechos no constituyen delito; la demora injustificada en el desarrollo de las investigaciones penales, entre otras.
Con relación a esto, es importante mencionar que, según la Personería, entre 2020 y 2023 la Línea Púrpura recibió 142.796 llamadas asociadas a VBG, de las cuales solo 52.962 fueron contestadas y atendidas por profesionales del área, además, cabe resaltar que esta es una línea de escucha mas no de atención y mientras se traslada la llamada se puede perder tiempo valioso para una víctima, por lo que es necesario ajustar el mecanismo. Por tal motivo, es fundamental aunar esfuerzos entre todas las entidades y desde todos los niveles, en aras de superar dichas barreras, logrando una atención integral evitando la revictimización.
En aras de brindar herramientas, logramos, en el marco de la discusión del Plan Distrital de Desarrollo 2024-2027, incluir que las casas refugio contemplen mecanismos dirigidos a las mujeres que se encuentran trabajando bajo cualquier modalidad y son jefas de hogar, para que la necesidad de ganar ingresos no prime sobre su vida misma. También incluimos la creación de una estrategia para la prevención y atención del acoso sexual en el espacio público. Adicionalmente, logramos impulsar una estrategia de articulación interinstitucional con el Sistema Articulador de Alertas Tempranas, para acopiar, verificar y analizar la información relacionada con el riesgo de feminicidio, fortaleciendo medidas de prevención, atención y acceso a la justicia.
Insistimos en que no han sido suficientes las medidas del Distrito para prevenir y atender las VBG, principalmente, en lo correspondiente a la protección de la vida de las mujeres. Muestra de lo anterior es el aumento de los feminicidios, por lo que instamos a la Administración Distrital a incrementar y mejorar las acciones en cuanto a la prevención y la atención de las VBG, y fortaleciendo en toda la ciudad campañas de prevención, reconociendo y dando herramientas al tejido comunitario, implementando en los barrios mecanismos de denuncia, lo que necesariamente debe incluir un rol mucho más activo de entidades como Secretaría de la Mujer, Secretaría de Integración Social, Secretaria de Salud, Secretaría de Educación, Secretaría de Seguridad y, por supuesto, Policía Metropolitana de Bogotá.